Lo que no se ve, pero se nota

El secreto de una buena pizza está en la masa.

En Vesuvio, la preparamos con calma, respeto por la tradición y los mejores ingredientes italianos.

Aquí no hay atajos: cada detalle cuenta, desde el primer amasado hasta el último minuto en el horno.

Porque creemos que una buena pizza no solo se come, se nota.

Nuestra masa fermenta entre 24 y 36 horas para que sea ligera, sabrosa y fácil de digerir.

La elaboramos cada día con una mezcla de harinas italianas tipo 00 e integral, y la amasamos lentamente para conseguir una textura perfecta: crujiente por fuera, suave por dentro.

Así conseguimos una base que sostiene todo el sabor, sin robarle protagonismo.

mira cómo lo hacemos